COLES DE BRUSELAS: UN SÚPER ALIMENTO CON POTENCIAL PARA COMBATIR EL CÁNCER

COLES DE BRUSELAS: UN SÚPER ALIMENTO CON POTENCIAL PARA COMBATIR EL CÁNCER. (INVESTIGACIÓN REALIZADA POR EL DR. MERCOLA.)

Si está buscando un alimento extremadamente rico en nutrientes, que también sea sabroso y fácil de preparar, no busque más, las coles de Bruselas son la solución.



Este miembro de la familia de vegetales crucíferos (junto con el brócoli, la coliflor, la col, la col rizada y más) era cultivado en Italia durante el reino de los emperadores romanos y recibió su nombre por la ciudad de Bruselas, Bélgica, en dónde tuvo su primera aparición en los 1200s.

Una taza de coles de Bruselas cocidas contiene tan sólo 56 calorías pero está cargada con más del 240 por ciento de la cantidad diaria recomendada (RDA por sus siglas en inglés) de vitamina K1 y casi 130 por ciento de la RDA de vitamina C.

Además, las coles de Bruselas son una buena fuente de fibra, manganeso, potasio, colina y vitaminas B. Incluso contiene proteína. Lo que es quizá lo más fascinante sobre las coles de Bruselas, sin embargo, no hemos acabado con su sorprendente gama de nutrientes. También contiene antioxidantes y otros fotoquímicos, que han probado combatir las enfermedades crónicas, incluyendo el cáncer.

LOS COMPUESTOS AZUFRADOS EN LAS COLES DE BRUSELAS PODRÍAN COMBATIR EL CÁNCER.

Las coles de Bruselas contienen compuestos azufrados llamados glucosinolatos, que son utilizados por su cuerpo para producir isotiocianatos, que activan sistemas enzimáticos que combaten el cáncer en su cuerpo. Como lo informó la revista Carcinogenesis:

“Los glucosinolatos son glicósidos que contienen azufrey se encuentran en los vegetales del genero Brassica. Sus productos de descomposición incluyen isotiocianatos, que son producidos después de la exposición a la enzima de la planta mirosinasa endógena. Los isotiocianatos son picantes, compuestos biológicamente activos que inhiben la carcinogénesis in vivo e inducen la apoptosis in vitro.”

El indol-3-carbinol, por ejemplo, es un producto de descomposición del glucosinolato que detiene el ciclo celular en las células de cáncer de mama sin matarlas. El ciclo celular es una serie de pasos controlados rígidamente al cual es sometida una célula antes de que se divida en dos, involucrando la duplicación del contenido de la célula y la división final.

Si puede alterar componentes específicos del ciclo celular, puede detener el crecimiento de las células de cáncer sin matar a las células normales. El indol-3-carbinol interfiere con el ciclo celular de tal manera que desactiva un gen para una enzima importante en el ciclo de crecimiento de la célula.

Las coles de Bruselas han sido relacionadas con la prevención de un número de tipos de cáncer, incluyendo el cáncer de colon, cáncer ovárico, y otros. Incluso, un estudio encontró que los compuestos en las coles de Bruselas podrían hacer que las células de cáncer cometan suicidio, lo que sugiere que añadir más de este súper alimento a su dieta podría ser una poderosa estrategia para combatir el cáncer.

De hecho, en un estudio, los hombres que comieron cerca de 1.5 tazas de coles de Bruselas al día durante cinco semanas, tuvieron una disminución del 28 por ciento en el daño del ADN, haciendo que los investigadores concluyeran que “el consumo de vegetales crucíferos [coles de Bruselas] podría disminuir el riesgo de cáncer.”

Si bien todos los vegetales crucíferos son conocidos por su potencial para combatir el cáncer, las coles de Bruselas han demostrado contener cantidades aún mayores de glucosinolatos en comparación con la coliflor, la col rizada y el brócoli.

LAS COLES DE BRUSELAS SON SUPERESTRELLAS DE LA DESINTOXICACIÓN

¿Para qué otra cosa son buenas las coles de Bruselas? Una de las razones por la que las coles de Bruselas son tan útiles en la prevención de enfermedades crónicas es debido al papel que desempeña en el sistema de desintoxicación del cuerpo. Como lo informó la George Maateljan Foundation:

“El beneficio de desintoxicación brindado por las coles de Bruselas es tanto complicado como extensivo. Primero, existe evidencia de estudios en humanos de que los sistemas enzimáticos en nuestras células necesarios para la desintoxicación de las sustancias causantes de cáncer pueden activarse por los compuestos hechos de glucosinolatos encontrados en las coles de Bruselas.

…Segundo, el sistema de desintoxicación del cuerpo requiere de un amplio suministro de azufre para trabajar efectivamente y las coles de Bruselas son ricos en nutrientes que contienen azufre…Los nutrientes que contiene azufre ayudan a reforzar los que comúnmente se conoce como la Fase 2 de la desintoxicación.

Tercero, nuestro sistema de desintoxicación del cuerpo necesita un fuerte refuerzo antioxidante- especialmente durante lo que se conoce como la Fase 1 de la desintoxicación. Las coles de Bruselas son capaces de brindar ese tipo de refuerzo porque son una excelente fuente de vitamina C y una muy buena fuente de manganeso. Las coles de Bruselas también contienen una amplia variedad de fitonutrientes antioxidantes, incluyendo muchos flavonoides antioxidantes.

Finalmente, existe evidencia de que el ADN en sus células está protegido por sustancias naturales en las coles de Bruselas y dado a que muchas toxinas ambientales pueden desencadenar los cambios no deseados en nuestro ADN, las coles de Bruselas pueden ayudar a prevenir estos cambies en el ADN desencadenados por las toxinas.”

Lo que hace que el consumo de alimentos enteros como las coles de Bruselas sea aún mejor es que muchos de los compuestos benéficos tienen usos múltiples en su cuerpo y trabajan sinérgicamente. Esos glucosinolatos que ayudan a combatir el cáncer y en la desintoxicación, por ejemplo. También ofrecen poderosas propiedades antinflamatorias en el cuerpo.



LAS COLES DE BRUSELAS SON ANTINFLAMATORIAS Y TIENEN PODEROSOS ANTIOXIDANTES.

Cuando las personas piensan en alimentos ricos en antioxidantes, es probable que las coles de Bruselas no sea lo primero en llegar a su mente…pero debería serlo. Ya que las coles de Bruselas no sólo contienen antioxidantes bien conocidos como la vitamina C, sino que también otros que son mucho menos conocidos- pero igual de importantes, como el kaempferol, isohamnetina, ácidos cafeico y ferúlico y el compuesto relativamente raro que contiene azufre llamado D3T (3H-1,2-ditiol-3-tiona).

Esto significa que, cuando usted come coles de Bruselas, está ayudando a su cuerpo a eliminar el estrés oxidativo crónico, que el principal factor de riesgo de muchos tipos de cáncer y otras enfermedades crónicas.

Al mismo tiempo, los compuestos antinflamatorios de las coles de Bruselas calmarán la inflamación crónica en su cuerpo, otro factor de riesgo de las enfermedades crónicas. ¿Recuerda que el indol-3-carbinol (I3C) que mencioné con respecto al cáncer de mama? Bueno, pues el I3C también es antinflamatorio y opera a nivel genético, ayudando a prevenir las respuestas inflamatorias a etapas tempranas en el desarrollo de la enfermedad.

Es debido a las propiedades antinflamatorias en las coles de Bruselas que podrían ofrecer beneficios en los problemas cardíacos, incluyendo ataques cardíacos y aterosclerosis. Como lo señaló la George Maateljan Foundation:

“El sulforafano isotiocianato (ITC) ha sido de particular interés, está hecho de glucorafanina (un glucosinolato) que se encuentra en las coles de Bruselas. El ITC no sólo desencadena la actividad antinflamatoria- sino que también podría ser capaz de prevenir e incluso ayudar a revertir el daño de los vasos sanguíneos.”

LA MEJOR FORMA DE PREPARAR (Y ¡DISFRUTAR!) LAS COLES DE BRUSELAS.

Añadir coles de Bruselas a sus platillos es una buena idea y también una muy sabrosas porque son sumamente versátiles. Puede hervirlas y mezclarlas con aceite de oliva, queso parmesano o mantequilla. Puede asarlas y mezclarlas como una ensalada con cebolla, queso feta y vinagre balsámico. Incluso puede mantenerlas refrigeradas, sazonadas con sal y pimienta, para comerlas como botana en algún momento del día- su tamaño pequeño- metiéndolas en empaques haciéndola una botana perfecta que estalla en su boca.

Tenga cuidado y evite cocinarlas en exceso, ya que esto no sólo puede dañar algunos de sus nutrientes, sino que también puede alterar su sabor. Si sus coles de Bruselas “huelen mal”, se ponen aguadas o un color verde pasado, podría significar que la coció en exceso. Lo ideal, es que tengan un color verde brillante con una textura ligeramente crujiente y un sabor dulce/a nuez agradable incluso después de ser cocinadas.